Siempre he tenido claro la necesidad que tienen tanto los pacientes como sus familiares, en esos primeros momentos que surgen dudas sobre conductas o síntomas que nunca habían estado presentes. 

Durante todos estos años he escuchado de todo en mi consulta, pacientes sin entender muy bien qué le estaba pasando. 

Después de acudir el propia paciente varias veces a su médico de atención primaria, y expresar su malestar y preocupación,  escuchar la respuesta del médico «es de la edad», «está atravesando una mala racha», «será ansiedad o depresión», «le voy a prescribir algún fármaco», etc.

Y familiares desesperados e impotentes, con el sentimiento de abandono,  porque llevan años de consulta en consulta sin que nadie les ayude ni les escuche.

Con mi experiencia de más de 18 años, he aprendido que muchas veces lo único que necesitan en estos primeros momentos, es alguien que le sepa escuchar, y que le explique de la manera más sencilla y cercana, lo que le está sucediendo a su familiar y al propio paciente.

Es mi objetivo principal, desde el primer día que Neurodemfa empezó a funcionar como Centro Terapéutico de Alzheimer. 

Confío plenamente en mi proyecto, y voy a seguir ayudando a todas aquellas personas que lo necesiten.